Zuoz es una comuna Suiza al sur del valle de Engadina, la visito una vez al año y disfruto mucho de la tranquilidad de la montaña y de sus azules lagos.
En este hermoso lugar, hace un tiempo, sentí que debía hacer un cambio en mi trabajo, convertir lo que era un exitoso método de coaching exclusivo a altos ejecutivos, en un sistema de auto coaching accesible para todos.
Sentí la necesidad de contribuir, de dar servicio a más gente y hacer más extensivo mi modelo de trabajo. Comencé a dar forma a lo que hoy llamo Las Buenas Prácticas, sintetizando más de 20 años de experiencia, fusionando lo mejor de los Sistemas Autoeducativos (programa que venía desarrollando desde hacía 15 años ) y mi método de coaching, que fui creando a través de muchas experiencias profesionales y de vida.
Me decidí a crear sesiones de autocoaching, de tal modo que las personas y las organizaciones que están dispuestas a cambiar y evolucionar cuenten con un método que las guie en su crecimiento y evolución.
Me propuse el desafío de que el método sea simple de aplicar, compatible con las extensas jornadas de trabajo y sobre todo que permita a través de la práctica aprender las habilidades y herramientas que hoy se necesitan para dar respuestas innovadoras a los cambios que enfrentamos.
Así comenzó la aventura de crear Las Buenas Prácticas.
Delta de Tigre es un conjunto de islas cercanas a la ciudad de Buenos Aires en Argentina.
Llegue al Delta por primera vez hace muchos años y se convirtió en uno de mis lugares preferidos por la paz y silencio que experimento allí en medio de la naturaleza. Condiciones indispensables para que la creatividad se exprese. Buscando la tranquilidad que me permitiera avanzar con la escritura de Las Buenas Prácticas, me retiré con Oliver unos días en Tao, la casa de dos queridos amigos Pablo y Adriana.
Ese periodo fue inspirador y pude avanzar e incorporar muchas de las referencias bibliográficas y películas que recomiendo en el programa.
Maui es una isla del archipiélago de las islas Hawaii.
Llegue a la isla alentada por Andrea Veneziani, mi compañero de vida, ya que mis ocupaciones laborales del momento, me dificultaban la concentración que necesitaba para escribir y así terminar la obra. Rodeada de la exuberante belleza de esta isla pude después de más de 1 año, terminar el Programa de Las Buenas Prácticas, una Guía de Autocoaching para el bienestar en el trabajo.
Pero como todo final, contiene en sí mismo el comienzo de algo nuevo, en ese momento di inicio a una serie de decisiones y cambios personales y profesionales, que eran necesarios para que Las Buenas Prácticas cobraran forma y así pudieran llegar a más personas y organizaciones en todas partes del mundo.
Hoy estoy feliz de poder contribuir con Las Buenas Prácticas como una posibilidad de entrenar y expandir liderazgo personal, sentirse efectivo y feliz.