El escritor y divulgador Mark Stevenson afirma que el optimismo en un imperativo moral en la actualidad, ya que a pesar de que vivimos una crisis de económica y de valores, si no estamos preparados para imaginar un mundo mejor estaremos condenados a vivir en un mundo todavía peor. Stevenson incide en que el cinismo es la norma cultural del momento; no obstante, debemos hacer un esfuerzo y tratar de establecer una corriente de pensamiento basada en el optimismo ambicioso. Cree firmemente que en este siglo se nos juzgará por nuestras creaciones y no por nuestras posesiones.
Tras estudiar miles de casos de personas que habían alcanzado metas significativas, estableció los ocho principios del optimismo pragmático haciéndose la pregunta «¿cómo consiguen algunas personas hacer cosas buenas en un mundo en constante cambio?». Pudo comprobar que había un patrón que se repetía y de ese modo estableció las siguientes máximas:
1. Tenemos que estar preparados para soñar con el futuro.
2. Todas las personas que consiguen hacer cosas buenas y significativas están comprometidas con un proyecto que va más allá de ellas mismas.
3. Hay que abrirse a la evidencia y basarse en los hechos objetivos. Esto se refiere a que debemos adoptar una forma de pensamiento más científica. Por ejemplo, un ingeniero realiza la construcción de una estructura partiendo de una realidad objetiva; es por ese motivo por el cual la ciencia va avanzando y mejorando. Por el contrario, un político parte desde una ideología de izquierdas o de derechas, negándose la mayor parte del tiempo a ver la realidad tal como es. ¡Debemos pensar como los ingenieros!
4. Las ideas debemos compartirlas en lugar de protegerlas. Cuando las ideas se comparten se confiere poder a las personas en lugar de ejercerlo sobre ellas.
5. No pasa nada si nos equivocamos. ¡Lo realmente grave e irresponsable es no intentarlo! Para los optimistas pragmáticos el error forma parte del camino. De hecho, lo consideran una de las mejores estrategias para poder avanzar. Para otros el error es catastrófico y esta forma de pensar les hace vivir estancados. El empresario estadounidense graduado en informática y filosofía Seth Godin afirma que «la mejor manera de empezar a avanzar es tomar el camino equivocado». Debemos recordar que la mejor manera de no mejorar el mundo es no hacer nada por miedo a equivocarnos.
6. Somos lo que hacemos, y no lo que tenemos intención de hacer. Somos lo que hacemos y lo que sentimos, no lo que imaginamos. Haz un pequeño ejercicio de introspección y piensa cómo sueles actuar y sentirte últimamente, eso te dará una pista muy importante sobre el tipo de persona que eres.
7. Trata de evitar un pensamiento cínico. El cinismo refleja una falta de ambición por mejorar las cosas y demuestra una creencia imperante de que no se puede o no vale la pena cambiar nada. Es la excusa perfecta para dar paso a la pereza y al estancamiento personal, ya que si pensamos que no podemos cambiar nada… ¿para qué vamos a intentarlo?
8. Cuando te embarques en un proyecto importante, plantéatelo como un torneo muy largo. Es fundamental saber prolongar la recompensa en el tiempo. Además, deberás tener presente que es posible que pierdas nueve batallas de cada diez. Pero si eres persistente y no desistes acabarás saboreando las mieles del éxito.
Espero que estos principios te ayuden a tomar conciencia sobre tu forma de ver el mundo, y que te sean útiles para adoptar una forma de pensar más sana y que te ayude a alcanzar aquellas metas que deseas. ¡Ten en cuenta que la calidad de tus pensamientos determina en gran medida la calidad de tu vida! ¡Te deseo mucho ánimo y buena suerte!
Aquí tienes una entrevista de Elsa Punset a Mark Stevenson donde tratan este tema de una forma muy interesante:
Fuente: http://www.nuecesyneuronas.com/
- Dudas?
- +549 11 3647 0309
- lp@laurapetraglia.com