Laura a la carta

Lee la ficha con detenimiento, las veces que necesites hasta que sientas que has comprendido su mensaje. Reflexiona, escucha tu voz interior, ¿Qué te dices a ti mismo?. Anota esos datos adicionales que llegan a ti a través de la intuición. Escribir te ayudará a enfocarte y te permitirá concretar más fácilmente lo que te propones, ya que puedes releer tus acuerdos y notas y volver a ratificarlos. La ficha contiene una frase positiva que puedes repetir a modo de mantra para reorientar tus pensamientos y despertar nuevos estados emocionales. Intenta hacer lo que te indica la ficha, adaptándolo a tu estilo y situación concreta. Concentra tu energía en la acción sugerida aunque te parezca al inicio extraña o inútil. Deja de procrastinar. Combate las excusas, la duda, la pereza, el miedo y otras emociones negativas que se despiertan ante el cambio de hábito, recuerda que son resistencias mentales a salir de la zona cómoda e ir hacia lo desconocido. Comprobarás, en la experiencia, que la ficha que elegiste es totalmente apropiada para ti y la situación que enfrentas, experiméntalo por ti mismo y verás los resultados. Recuerda que, sincrónicamente has elegido HOY, ese mensaje entre todas las demás posibilidades.

Ubica la ficha en algún lugar visible para ti, para que funcione a modo de recordatorio, permitiendo focalizarte y repetir la práctica. Cuando sientas que haz incorporado esa acción, estás listo para definir el siguiente paso, seleccionando otra ficha.

Otras alternativas: Hacer un plan completo de desarrollo personal, al realizar las 64 fichas de una a la vez, 1 por semana, por ejemplo.Hacer un plan parcial: leerlas todas y seleccionar algunas de ellas, las que crees te ayudan más en el momento actual y comenzar a practicar de una en una. O bien crear tu propio modo de utilizarlas, el que decidas que es mejor para ti. Lo importante es tener la fuerza y disciplina para pasar a la acción, sin victimizarte, cuestionar o excusarte o posponer para mañana. Deberás vences tus obstáculos personales que muchas veces se ligan a la pereza que da realizar algo diferente. Recuerda que tu cerebro se resistirá al cambio, creará obstáculos y excusas para no hacerlo, por ello debes impulsarte y practicar reiteradamente para que se creen nuevas conexiones neuronales que te permitan aprender y cambiar. Practicar es intentar verdaderamente un cambio y no solo desear o decir que quieres hacerlo. No importa si la primera vez no sale todo bien, acepta los errores como parte del camino y sigue practicando. Te aliento a que utilices las fichas y te dispongas con energía y apertura a practicar, ya que al hacer: experimentas, cambias, aprendes, creces y avanzas.