Los estudios de Psicología Positiva, llegan a la conclusión de que la fórmula de la felicidad es:
F= P+C+A
(Felicidad = Predisposición + Condiciones de vida + Actividades)
La P es el punto en el cerebro en el que vemos el mundo. Si vemos al mundo como un problema o como una oportunidad. Este punto de partida es el responsable del 40% de nuestras experiencias. Se determina en los primeros tres años. Si de niños estábamos rodeados de gente que estaba permanentemente quejándose, probablemente tengamos propensión a ser una persona infeliz. Sin embargo, podemos cambiar nuestra programación mental, podemos aprender a pensar diferente.
La C de la fórmula, representa las condiciones en las que vivimos, ellas influyen en un 10 o 15 % en nuestras experiencias vitales. Si uno es pobre tiene efecto en la infelicidad, si uno es rico y si piensa en dinero todo el día también tiene tendencia a la infelicidad. Hay estudios que demuestran que quienes ganan la lotería, en un año vuelven al mismo punto, llegan a picos de felicidad y luego bajan.
La A, la última parte de la fórmula son acciones voluntarias, que se dividen en dos partes. Las primeras si son puramente por placer: ir de shopping, cenar, entretenimiento, comida, tomar vinos, salir, sexo. Nos da felicidad en un período corto de uno a cinco días.
Las otras, son las que nos enriquecen, las que expresan nuestra creatividad, por las cuales sentimos que la vida tiene sentido. Cuando nos sentimos apasionados en expresar nuestro talento. Todo esto crea un estado de plenitud y un estado de felicidad más permanente” esto impacta en un 50% en la fórmula de la felicidad.
Este último punto es central ya que nos muestra que lo que elegimos hacer, de nuestros hábitos y acciones depende el porcentaje más importante de nuestra felicidad.
Fuente: La receta de la felicidad. Deepak Chopra, Grijalbo, 2011